Cómo aliviar el dolor de hombro: el problema del diagnóstico

como aliviar el dolor de hombro

Cómo aliviar el dolor de hombro: ¿Qué tengo con precisión?

¿Te han diagnosticado algún problema de hombro y no sabes realmente lo que te sucede o en qué consiste la lesión? Ya te hayan diagnosticado omalgia, síndrome del pinzamiento subacromial o impingement de hombro, “tendinitis” o rotura parcial del supraespinoso, vamos a intentar que te quede un poco más claro todas estas lesiones y en qué consisten y por qué nos suceden.

Si te diagnostican una omalgia…probablemente hayas perdido el tiempo en ir a dónde te lo han diagnosticado, esto solo significa “dolor de hombro”, es un concepto médico que no especifica ninguna lesión o patología.

Dentro de las patologías más frecuentes en el hombro encontramos el impingement de hombro o síndrome del pinzamiento subacromial de hombro, este concepto se está utilizando para recoger varias patologías ya que se describe como un estrechamiento del espacio subacromial y todas las estructuras que comprenden este espacio, así que, dentro de este síndrome nos podemos encontrar patologías como la tendinopatía del manguito del rotador, tendinopatía o rotura parcial del supraespinoso, tendinopatía o rotura parcial del tendón de la cabeza larga del bíceps o compresión de la bursa (produciendo bursitis) (Struyf et al., 2013). 

¿Por qué se producen este tipo de patologías?

La mayoría de estás lesiones están relacionadas con un movimiento repetitivo por encima de la cabeza, ya sea en la vida cotidiana o algún gesto deportivo (Ludewig and Cook, 2000; Cools et al., 2008). 

Otros factores que pueden contribuir al desarrollo de la lesión son el déficit de control motor de la escápula (que más adelante desarrollaremos y explicaremos algún ejercicio), una mala postura (hombros hacia delante, lo que hace que el espacio subacromial se reduzca y comprometa más a las estructuras), problemas metabólicos como la diabetes y otros problemas de estilo de vida como fumar u obesidad. 

Ya hemos dicho que estas patologías se relacionan con un déficit de control motor, pero ¿qué significa esto? Esto quiere decir que en el hombro no está funcionando la musculatura que tiene que funcionar en cada momento, y hay algunos músculos que están sufriendo porque están trabajando más de la cuenta por culpa de los que no están trabajando, poco o nada. En este caso, el trapecio (fibras ascendentes) está trabajando en exceso y el serrato anterior y el trapecio (fibras descendentes) no están trabajando correctamente. Así que para empezar a tratar nuestro dolor es bueno hacer estos ejercicios (Struyf et al., 2013).

Y si me duele… ¿Cómo voy a hacer los ejercicios?

Probablemente estos ejercicios no requieren un rango de movilidad en los que vaya a provocar dolor, de todas formas, siempre vamos a realizar los ejercicios con la regla no dolor, si hay algún movimiento que nos duela encontraremos otra forma de realizarlo.

No siempre nos duele el hombro de la misma manera ni en los mismos movimientos, esto se debe a que hay diferentes músculos que realizan diferentes acciones que pueden provocar dolor en el hombro o también que se irradien hacia otra parte, a continuación, vamos a ver algunos de los más importantes y el recorrido del dolor que provocan.

Músculo coracobraquial

Músculo deltoides

Músculo subescapular

Músculo supraespinoso

Músculo pectoral mayor

Músculo dorsal ancho

Músculo infraespinoso

Músculo redondo menor

Músculo redondo mayor

Músculo romboides

Músculo angular de la escápula

Y si no me han diagnosticado nada todavía… ¿Cómo puedo hacerlo?

Es verdad que la prueba más fiable es la resonancia magnética, y que una ecografía puede ayudar al diagnóstico, pero también existen una serie de pruebas ortopédicas o test que se pueden realizar en consulta que pueden identificar estas patologías y así enfocar el tratamiento (Mulyadi et al., 2008; Tagg et al., 2013).

Pues a mi me duele el hombro y en la resonancia no sale nada, ¿a qué se debe? 

Esto se debe a que a lo largo del movimiento del hombro intervienen distintas articulaciones, y en los últimos grados (de 120º a 180º, llevar el hombro pegado a la oreja) intervienen nuestras dorsales y nuestras cervicales, esto quiere decir que si me duele el hombro al final del movimiento el problema no tiene que estar en el hombro obligatoriamente, sino que hay que revisar la movilidad de las dorsales y las cervicales.

Por otra parte, desde la cervicales sale la inervación de los hombros, es decir, el nervio que le dice al músculo que haga un movimiento determinado. Para que lo entendáis mejor, tenemos 7 cervicales (C1, C2, C3 y así hasta C7), pues de C5 sale el nervio que nos dice que levantemos el brazo lateralmente, esto quiere decir que si tenemos un problema en C5 (ya sea por una hernia o una protusión, o simplemente que esa zona está rígida y no se mueve bien) podemos tener dificultad para realizar el movimiento o dolor en la zona. (Ejemplo de por qué puede doler el hombro por un problema en las cervicales).

Y, para terminar, unos consejos para intentar prevenir o disminuir el dolor de hombro:

  • No dormir con los brazos por encima de la cabeza, también podemos dormir con el brazo afecto sobre una almohada para disminuir la presión sobre el tendón que está comprometido (Tekeoglu et al., 2013). 
  • Hacer ejercicios de flexibilidad, fortalecimiento y estabilización de la musculatura que hemos dicho anteriormente es importante, también ejercicios de corrección postural (Baltaci, 2003).
  • Puedes explorar nuestras opciones de fisioterapia a domicilio en Madrid para que profesionales de primer nivel te acompañen en el tratamiento.

REFERENCIAS

Baltaci G. (2003). Subacromial impingement syndrome in athletes: prevention and exercises programs, Acta orthopaedica et traumatologica. Turcica.

Cools, A.M., Cambier, D. & Witvrouw, E.E. (2008). “Screening the athlete’s shoulder for impingement symptoms: a clinical reasoning algorithm for early detection of shoulder pathology”. British Journal Of Sports Medicine, 42(8), 628-635. 

Ludewig, P.M. & Cook, T.M. (2000). “Alterations in shoulder kinematics and associated muscle activity in people with symptoms of shoulder impingement”. Physical Therapy, 80(3), 276-291. 

Mulyadi, E., Harish, S., O’Neill, J. & Rebello, R. (2008). “MRI of impingement syndromes of the shoulder”. Clinical Radiology, 64(3), 307-318.

Struyf, F., Nijs, J., Mollekens, S., Jeurissen, I., Truijen, S., Mottram, S. & Meeusen, R. (2013). “Scapular-focused treatment in patients with shoulder impingement syndrome: a randomized clinical trial”. Clinical Rheumatology, 32(1), 73-85. 

Tagg, C.E., Campbell, A.S. & McNally, E.G. (2013). “Shoulder impingement”. Seminars in Musculoskeletal Radiology, 17(1), 3-11. 

Tekeoglu, I., Ediz, L., Hiz, O., Toprak, M., Yazmalar, L. & Karaaslan, G. (2013). “The relationship between shoulder impingement syndrome and sleep quality”. European Review For Medical And Pharmacological Sciences, 17(3), 370-374. 

Pilates
Por favor, completa el formulario para reservar tu clase de pilates. Nos pondremos en contacto para confirmar la disponibilidad. ¡Te esperamos!

¿Dudas sobre tu rehabilitación? Escríbeme y te responderé contándote cómo te puedo ayudar.

¿Dudas sobre los sofocos en la menopausia? Escríbeme y te responderé contándote cómo te puedo ayudar.

¿Dudas sobre el SIBO? Escríbeme y te responderé contándote cómo te puedo ayudar.