En medio del auge del home office y el trabajo de oficina, indagamos en la ergonomía en el trabajo: descubre la importancia de cuidar el cuerpo, realizar ejercicios y mantenerse en actividad para revitalizar cuerpo y espíritu, y algunos consejos prácticos brindados por expertos.
Qué es la ergonomía y por qué es crucial en la era digital
Vivimos en un mundo donde el trabajo se ha trasladado, en gran medida, a entornos digitales. El auge del home office y el crecimiento de las oficinas tradicionales han hecho que pasemos la mayor parte del día sentados frente a pantallas. En este contexto, la ergonomía en el trabajo cobra una relevancia sin precedentes.
Pero, ¿qué es la ergonomía en el trabajo? Se trata de la disciplina que estudia la adaptación del entorno laboral a las capacidades y limitaciones del cuerpo humano, buscando prevenir dolencias musculoesqueléticas, fatiga visual y estrés.
Sin embargo, en medio de esta digitalización, es fundamental recordar que no somos solo mentes conectadas a dispositivos, sino cuerpos que requieren movimiento, contacto con la naturaleza y una armonía entre el bienestar físico y emocional. Cuidar nuestra postura y adaptar nuestro espacio de trabajo no es solo una cuestión de comodidad, sino de salud integral.
La historia del trabajo de oficina y la aparición del home office
El trabajo de oficina, tal como lo conocemos hoy, se consolidó en la Revolución Industrial, cuando la burocracia y la administración de empresas empezaron a requerir grandes cantidades de empleados para labores contables y organizativas. Con la llegada de la tecnología y los ordenadores en el siglo XX, el trabajo de oficina se volvió cada vez más sedentario.
El siglo XXI trajo consigo un cambio radical con el home office, impulsado por la conectividad digital y acelerado por la pandemia de 2020. Lo que inicialmente se veía como una solución temporal se convirtió en una modalidad laboral extendida, generando ventajas como la flexibilidad horaria, pero también nuevos retos ergonómicos. Las oficinas están diseñadas para el trabajo prolongado, con sillas ergonómicas y escritorios adecuados, pero en casa muchos improvisan su espacio, aumentando el riesgo de lesiones.
Beneficios y desafíos de la ergonomía en el trabajo de oficina
Trabajar en una oficina tradicional ofrece ventajas estructurales que favorecen la ergonomía, tales como:
- Sillas ergonómicas diseñadas para largos periodos de trabajo.
- Espacios iluminados correctamente para reducir el esfuerzo visual.
- Escritorios a una altura adecuada para mantener una buena postura.
- Pausas estructuradas que permiten el descanso.
No obstante, también hay desafíos que afectan al cuerpo, como:
- Sedentarismo prolongado, que aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
- Estrés postural debido a posiciones repetitivas mal ejecutadas.
- Fatiga visual por la exposición continua a pantallas.
Cómo mejorar la ergonomía en el trabajo y prevenir lesiones
Ya sea que trabajes en una oficina o desde casa, existen estrategias clave para optimizar la ergonomía en el trabajo:
- Ajuste del mobiliario: La silla debe permitir que los pies descansen en el suelo y que la espalda tenga un buen apoyo lumbar.
- Altura del monitor: La pantalla debe estar a la altura de los ojos para evitar forzar el cuello.
- Teclado y ratón: Deben estar al nivel de los codos y cerca del cuerpo para reducir tensiones en hombros y muñecas.
- Pausas activas: Levantarse cada 30-60 minutos, estirar y caminar unos minutos ayuda a reducir la rigidez muscular.
- Ejercicio regular: Complementar la jornada laboral con actividad física mantiene la salud musculoesquelética.
- Atención profesional: Si ya se presentan dolencias, un fisioterapeuta a domicilio en Madrid puede ser una solución efectiva para tratar lesiones y mejorar la postura.
Consejos de ergonomía según el tipo de trabajo
Trabajo remoto de escritorio
- Utilizar un escritorio con una altura adecuada.
- Contar con una silla ergonómica con soporte lumbar.
- Implementar descansos cada hora para evitar la fatiga visual y muscular.
Trabajo artesanal
- Ajustar la altura de la mesa de trabajo para evitar encorvarse.
- Utilizar alfombrillas antifatiga si se trabaja de pie.
- Implementar ejercicios de estiramiento para manos y muñecas.
Trabajo operativo
- Mantener posturas seguras al levantar objetos pesados.
- Usar calzado adecuado con soporte ergonómico.
- Implementar pausas activas y rotación de tareas para evitar sobrecarga.
Trabajo físico repetitivo
- Realizar ejercicios de movilidad antes y después de la jornada.
- Utilizar herramientas ergonómicas para minimizar el impacto en las articulaciones.
- Alternar el uso de ambas manos cuando sea posible.
Trabajo de docencia
- Mantener una postura adecuada al escribir en pizarras y ordenadores.
- Utilizar un micrófono de diadema para evitar tensión en el cuello al hablar prolongadamente.
- Incorporar pausas para moverse y evitar el sedentarismo.
Trabajo de medicina
- Asegurar posturas correctas al atender pacientes en consulta o cirugía.
- Usar calzado cómodo, consultar con un profesional (tipo clásico o barefoot)
- Implementar ejercicios de relajación para liberar tensiones acumuladas.
Trabajos asistenciales
- Realizar levantamientos seguros al ayudar a personas con movilidad reducida.
- Usar soportes ergonómicos para evitar sobrecargas en la espalda.
- Alternar tareas para reducir la fatiga muscular.
Recuperar el equilibrio: conectar con nuestro cuerpo y la naturaleza
El desafío de la era digital no es solo encontrar una silla ergonómica o un buen escritorio, sino recuperar la conciencia de que somos seres físicos que necesitan movimiento, descanso y conexión con la naturaleza. La sobreexposición a pantallas y la rutina sedentaria han hecho que muchos pierdan la sensación de bienestar corporal.
Incorporar pausas al aire libre, practicar respiraciones conscientes y movernos de manera regular es clave para mantenernos en armonía con nuestra salud física y emocional. Según la OMS, para estimular beneficios en la salud, los adultos deben realizar un promedio mínimo de 300 minutos de actividad física de intensidad moderada, o 150 minutos de actividad física aeróbica vigorosa, o bien también una combinación equivalente de ambas modalidades.
Como comprobamos y reflexionamos en este artículo, la ergonomía en el trabajo no sólo trata de prevenir dolencias, sino de promover un estilo de vida más consciente y saludable. Adaptar nuestros espacios, movernos con más frecuencia y conectar con nuestro cuerpo son pasos esenciales para lograr un bienestar integral en tiempos de digitalización extrema.
